México se mantiene como el mayor exportador de frutas y vegetales frescos del mundo, de acuerdo con datos publicados por Opportimes el 1 de julio de 2025, con base en cifras del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA). Este liderazgo, sostenido desde 2020, refleja la solidez del sector agroalimentario mexicano en un entorno global cada vez más competitivo.
Durante el último ciclo anual, México superó nuevamente a Estados Unidos, China y Países Bajos en exportaciones hortofrutícolas, posicionándose en el primer lugar por volumen y valor comercial. De acuerdo con la información reportada, Estados Unidos fue el principal destino de estas exportaciones, absorbiendo la mayoría de los embarques mexicanos.
¿Qué productos lideran el ranking?
Los productos más destacados en el portafolio exportador son:
Aguacate
Jitomate
Frutas rojas (berries)
Estos tres rubros concentran una gran parte del valor total exportado, y su demanda se ha incrementado en mercados clave como Estados Unidos, Canadá, Japón y países de la Unión Europea.
Según Opportimes, este liderazgo es resultado de una combinación de factores logísticos, sanitarios y de cercanía geográfica, que hacen de México un socio comercial atractivo para grandes potencias importadoras.
“México ha demostrado una gran capacidad para mantener la calidad, cumplir con regulaciones internacionales y responder ágilmente a la demanda global”
Opportimes, Medio especializado
Las claves del éxito
El modelo agroexportador mexicano se ha fortalecido por:
Altos estándares fitosanitarios y de inocuidad, que cumplen con normativas exigentes como las del USDA y la FDA.
Infraestructura logística robusta, especialmente en zonas productoras del Bajío, occidente y norte del país.
Mano de obra calificada en el manejo poscosecha, empaque y distribución.
Política comercial activa, con acuerdos que permiten acceso preferencial a más de 40 países.
Además, los tratados internacionales —como el T-MEC— han permitido eliminar barreras arancelarias y mejorar las condiciones de competitividad para los exportadores nacionales.
Los retos que persisten
Pese al éxito exportador, el modelo enfrenta desafíos estructurales importantes:
Presión sobre recursos naturales, especialmente el uso intensivo del agua en regiones con escasez hídrica.
Condiciones laborales desiguales, particularmente en campos agrícolas donde prevalece la informalidad.
Falta de diversificación de destinos: Estados Unidos sigue representando la mayor parte del comercio, lo que hace vulnerable al sector ante decisiones políticas o sanitarias de ese país.
Según especialistas citados por Opportimes, una tarea clave será mantener la competitividad sin comprometer la sostenibilidad ambiental ni los derechos laborales.
Reflexión final
En el caso del agro mexicano, más del 40% de las personas que trabajan en la producción y empaque de frutas y verduras son mujeres. Sin embargo, su presencia en roles de liderazgo, propiedad de tierras o representación sindical sigue siendo marginal.Muchas mujeres rurales laboran en condiciones de informalidad, con jornadas extensas, baja remuneración y sin acceso a servicios como guarderías o transporte. A pesar de ser pieza clave para sostener esta industria, su trabajo continúa invisibilizado y subvalorado.Por eso, mientras México celebra su liderazgo global, urge repensar el modelo agroexportador con una mirada más inclusiva: que reconozca el aporte de las mujeres, que repare las brechas estructurales y que construya un futuro agrícola justo, sustentable y con oportunidades reales de desarrollo para todas las personas.



